Mantener el nivel de compromiso en una empresa no es fácil. Todos comenzamos a trabajar con mucha ilusión y ganas porque el trabajo es novedoso y nos plantea retos. Pero con el paso del tiempo, es normal sentir que “ya sabemos todo” y nos relajemos, que comencemos a trabajar de una forma más mecánica y que esa llama que nos mantenía activos las primeras semanas, se vaya apagando.
Por eso, es fundamental mantener a nuestro equipo motivado. Existen muchas formas de poder hacerlo y da igual el tamaño de la empresa, porque la motivación se ajusta a cualquier presupuesto. ¿Te reúnes con tu equipo regularmente?, ¿escuchas sus necesidades?, ¿sabes qué opinión tienen acerca de la empresa? El simple acto de escuchar, ya es sinónimo de motivar, porque consigues que tu equipo se sienta parte de algo más que un trabajo.
Beneficios de la motivación
- Mayor productividad. Para las personas es importante saber que no son un número más en tu empresa, que les tienes en cuenta y que el proyecto avanza también gracias a ellas. Si consigues esto, el nivel de productividad aumentará porque tu equipo se sentirá más comprometido con lo que hace.
- Disminución de problemas. Si tienes un equipo desmotivado, lo más probable es que, con el tiempo, caigan en el ausentismo, la impuntualidad o, incluso, lleguen a generar un mal clima entre ellos. Además, la desidia puede llegar a afectar emocional y físicamente. La motivación, en cambio, ayuda a paliar conflictos y a lograr un mayor entendimiento y empatía entre las personas que forman el equipo.
- Empresa fuerte y competitiva. Un equipo que se siente escuchado tendrá más libertad para proponer ideas que hagan crecer a nuestra organización. Todo lo que aporten, sumará y en consecuencia tendremos una estructura empresarial más fuerte y mejor preparada para afrontar la competitividad del mercado.
- Retención del talento. La causa más frecuente por la que una persona acaba abandonando una empresa, es por la falta de motivación y retos. Si un empleado siente que su trabajo le aporta crecimiento laboral y personal, se quedará con nosotros. Si siente que a pesar de su valía se queda estancado, acabará marchándose.
- Mejor imagen de empresa. Tan importante como retener talento, también lo es saber localizarlo. En este sentido, la motivación juega un papel crucial, porque las personas no solo valoran aspectos económicos; el buen ambiente de trabajo, la cercanía en la relación jefe-empleado o contar con unas condiciones óptimas de trabajo son factores determinantes para que un talento decida apostar por nosotros.
Motivación como sinónimo de éxito
Conseguir que un equipo se sienta motivado comienza por saber escuchar las necesidades de cada persona. Mostrar interés y empatía nos ayudará a descubrir la clave para hacer que nuestra plantilla crezca. La motivación juega a favor de todos y sus beneficios son medibles a corto plazo.
Si estamos buscando estrategias para fomentar la motivación en nuestra empresa pero no sabemos muy bien cómo abordar la situación, la figura del mediador puede ayudarnos a encontrar herramientas que se ajusten a lo que nuestro equipo necesita. Como ojo externo, sabrá identificar las dificultades y proponer soluciones que impulsen la predisposición de las personas.