Bien entrado el otoño, es habitual ver los centros de las grandes ciudades repletos de personas cargadas de bolsas de diferentes marcas. Todos van de una tienda a otra buscando prendas y productos al mejor precio posible para ir adelantando los regalos de navidad. Este escenario es ya un habitual en las principales ciudades europeas, cuyos comercios comienzan la temporada alta de ventas con el bautizado como “Black Friday”, una oportunidad de encontrar grandes rebajas a las puertas de la época navideña.

El alto consumo siempre es una buena noticia para las organizaciones, pero ¿Qué pasa con los trabajadores?, ¿Cómo viven este momento del año teniendo que atender a multitud de personas, tanto presencialmente como online? Se trata de un periodo laboral muy exigente, que empieza en noviembre y se extiende hasta enero. Un periodo en el que, normalmente, los equipos de trabajo realizan horas extras, descansan menos y los roces entre compañeros y superiores pueden aumentar a causa del estrés que supone. ¿Cómo podemos rebajar esta situación en un momento tan agotador?

 

Tips para rebajar tensiones en momentos de alta intensidad laboral
  • Planifica a tu equipo. Está claro que durante estos meses siempre pueden surgir imprevistos de última hora, pero, en la medida de lo posible, un aspecto que facilitaría mucho la vida del trabajador es la planificación. Saber de qué se va a encargar, en qué horarios y qué días. La antelación es un factor clave que favorece la conciliación y, por ende, el bienestar y buena predisposición del empleado en su trabajo.
  • Evita las horas extra. El cansancio es el gran enemigo de los trabajadores durante estos  meses. No solo les impide trabajar con la energía habitual, también les dificulta ser proactivos, les desmotiva y hace que todo se perciba con más negatividad. Además, puede propiciar el enfrentamiento entre compañeros por situaciones que en otros momentos no habrían sido motivo de discusión. Por eso, es de suma importancia respetar las horas de trabajo del empleado. 
  • Crea espacios de diálogo. El ritmo frenético, el estrés y el descontrol pueden ocasionar fricciones entre compañeros. Es habitual que en momentos de alta intensidad solo nos fijemos en nuestro trabajo sin tener en cuenta el del otro. Esta situación puede llevar a malentendidos que pueden llegar a intensificarse si no se tratan a tiempo. Identificar estos conflictos es importante porque su solución es posible si facilitamos el diálogo entre las dos partes.
  • Escucha a tus empleados. En momentos de alta intensidad, es de vital importancia para los superiores recordar que trabajan con un equipo humano. Por eso, es esencial poner atención y escuchar las posibles necesidades que puedan tener sus trabajadores. Cada uno tiene sus particularidades y dificultades e ignorarlas pensando solo en la productividad, es contraproducente a muy corto plazo. El trabajador se sentirá un número más y poco respetado en su labor.
  • Apuesta por la motivación. Si algo sale mal no te limites a llamar la atención, piensa si tu equipo está lo suficientemente motivado. Recordar aspectos como la importancia de su labor, los factores positivos de esta época tan extenuante o recompensarles con algo más de retribución o salario emocional es importante para construir un equipo fuerte y sano.

Si  la alta intensidad laboral te desborda y no sabes muy bien cómo afrontar la situación, la figura de un mediador pueda ayudarte, como figura externa, a identificar conflictos y fricciones, proponiendo soluciones que refuercen el entendimiento entre los afectados a través de la escucha, el diálogo y la empatía.