Estamos acostumbrados a convivir, en nuestro día a día, con personas de distintas culturas, etnias, géneros, religiones o capacidades. De repente, la globalización y el hecho de tener más información que nunca a nuestro alcance, nos ha tendido un puente que enriquece nuestra forma de ver la vida y que nos abre nuevas posibilidades. Al igual que la multiculturalidad y la diversidad nos afecta positivamente en lo personal, es un aspecto que también podemos extrapolar hacia lo laboral. Por eso, las empresas deben trabajar en fortalecer este aspecto, si no lo están haciendo ya.
En algunas ocasiones, las organizaciones más clásicas, tienen dudas a la hora de abrir sus puertas a perfiles que propongan un pensamiento distinto por temor a que pueda ocasionar conflictos. Pero nada más lejos de la realidad. Con el tiempo se ha demostrado que la inclusión construye espacios de trabajo en los que el debate favorece el nacimiento de nuevas ideas e impulsa el talento. Además de alimentar factores tan esenciales en la vida laboral como la empatía y la sensibilización.
Algunos motivos para reforzar la diversidad en tu organización
1. Retención y captación de talento
La forma de ver la vida ha cambiado mucho en los últimos años y, especialmente las nuevas generaciones, no ven a su empresa únicamente como un lugar en el que retribuirse, sino como un espacio en el que seguir creciendo también de forma personal. Por eso, valoran tanto formar parte de una organización diversa que les proponga nuevos enfoques y enriquezca sus valores.
2. Más y mejores ideas
Precisamente, la diversidad propone adoptar un enfoque heterogéneo de ideas y pensamientos que abre la posibilidad de descubrir otros puntos de vista, que favorezcan el nacimiento de nuevas ideas más frescas e innovadoras. Al final, si todos pensamos igual, entraremos en un bucle de propuestas semejantes que no nos dejará avanzar.
3. Refuerzo de imagen positiva
Apostar por la diversidad y la inclusión nos posicionará como una empresa que vela por el bienestar de las personas y que brinda a todos, independientemente de su condición, las mismas oportunidades. Esto concuerda con la imagen de lo que una organización debe ser hoy en día y nos abrirá nuevas puertas y oportunidades en nuestro sector.
4. Dar visibilidad
Las personas están evolucionando y, en la actualidad, existen colectivos que todavía siguen silenciados porque no han conseguido tener una primera oportunidad. El trabajo constituye una puerta muy importante para personas que todavía viven en el margen; contar con ellas y hacerles visibles es esencial para conseguir su integración completa en la sociedad.
5. Variedad de perspectivas
Atender a otras realidades distintas a las normativas puede ayudarnos a reforzar aspectos como la empatía, la escucha o el compañerismo. Se trata de un factor fundamental para construir lazos más fuertes entre los trabajadores e impulsar otras características como la motivación o la productividad.
La inclusión de la diversidad en la vida laboral es un factor de suma importancia para las corporaciones actuales porque, además de fomentar la creatividad de nuestro equipo humano, nos abre nuevas posibilidades. Por otra parte, se ha convertido en una necesidad para construir una marca más competitiva que pueda estar a la altura de las exigencias del mercado. Si queremos potenciar este aspecto, la figura del mediador, como ojo externo, puede ayudarnos a identificar la mejor forma de integrar este valor en nuestra organización.