La época estival está a la vuelta de la esquina y para las personas con hijos esto significa dos cosas: que durante tres meses la conciliación se complica y que hay que hacer malabares para poder atender a niños y trabajo. En la actualidad, existen otros modelos como el híbrido o remoto, que nos permiten cierta flexibilidad. Pero a la hora de la verdad esto se convierte en una utopía. En primer lugar, porque si estás en casa no es fácil trabajar con unos niños que están disfrutando de sus vacaciones y reclaman atención y, en segundo lugar, porque no todos los trabajos son aptos para la colaboración en remoto, por sus características.

La situación no es fácil para las familias porque se trata de un periodo en el que es muy fácil que se nos agote la paciencia (teniendo en cuenta, además, las altas temperaturas) y que, en consecuencia, la eficiencia en las tareas se resienta. Por eso, la conciliación es un tema que no debe ser ajeno a las empresas y deben colaborar en la medida de lo posible para facilitar una conciliación real. Entonces, ¿Qué pueden hacer organizaciones y familias para afrontar esta situación?

 

Consejos para afrontar un verano con niños 

 

Planifica y prioriza

Este debe ser uno de los mantras del verano. Es importante que antes de que llegue toda la vorágine estival planifiques bien tu trabajo y sepas con toda la antelación posible cuales son aquellas tareas a las que debes dar prioridad. Esta estrategia te ayudará a no perder el foco y a dedicarte a lo realmente importante, dejando para otro momento aquello que puede esperar.

 

Opta por la jornada intensiva

 Cuando el calor comienza a apretar es normal que muchas personas escojan realizar una jornada intensiva que les libere algo la tarde. Esto es una buena opción para algunas familias, ya que permite que durante las mañanas sus hijos acudan a un campamento de verano o estén con los abuelos y por la tarde puedan ocuparse de ellos. Como empresa debemos facilitar esta opción.

 

Trabajo desde cualquier lugar

Si la empresa permite teletrabajar, una buena medida para poder paliar los problemas de conciliación es dejar que los empleados trabajen desde cualquier zona geográfica. Esto puede suponer una gran liberación, porque las familias con hijos tienen la posibilidad de trasladarse a su residencia de verano (si la tienen) para poder trabajar con más facilidad mientras los niños se divierten.

 

Servicio de guardería

 Los espacios en las oficinas se están redefiniendo. Aunque se trata de una opción que no está al alcance de todas las empresas por su coste, una buena medida sería incorporar al espacio una guardería donde los empleados con niños puedan dejar a sus hijos unas horas. También es interesante ayudar a las familias financiando parte de las actividades extraescolares como el campamento de verano.

 

El verano está a punto de llegar y para muchos empleados la situación les somete a un estrés muy elevado. Por eso, preservar la salud mental a través de la escucha, el diálogo y la comprensión es esencial para poder llegar a septiembre de la mejor forma posible. En este sentido, la figura del mediador puede ayudarnos a encontrar técnicas que favorezcan un entorno de trabajo empático y a adoptar medidas que faciliten la conciliación sin perjudicar a la productividad de la empresa.